Panzós, Alta Verapaz, 23 de mayo de 2019. Con el objetivo de orientar a los habitantes de las fincas Río Polochic y Lagartos, ubicadas en el Municipio de Panzós, Alta Verapaz, sobre temas básicos de economía, derechos, uso y manejo de los bienes naturales y socioambientales, un grupo de 40 líderes y lideresas participó en un taller que contribuirá al desarrollo del capital humano, así como de la economía familiar y comunitaria de los lugares mencionados.
La actividad, organizada por las unidades de género del Ministerio de Economía –Mineco–, del Consejo Nacional de Áreas Protegidas –Conap– y del Instituto Nacional de Bosques –Inab–, en coordinación con el Viceministerio de Desarrollo de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa, busca además, diseñar junto a los comunitarios el proceso de acompañamiento y formación–capacitación en temas relacionados con emprendimientos derivados de los productos provenientes del bosque y la diversidad biológica del municipio.
Como parte de las medidas para potenciar la economía, se identificarán las especies nativas de la flora a nivel local para potencializar su uso y aumentar las medidas de protección existentes para conservación de las mismas.
Al final, se espera coordinar diferentes actividades alrededor del Modelo de Desarrollo de Comunidades Agrarias del Fondo de Tierras y con instituciones de gobierno para iniciar el fortalecimiento y empoderamiento de las mujeres y hombres maya q’eqchi des las fincas mencionadas en el Municipio de Panzós.
En mediano y largo plazo, la idea es construir un plan de formación y capacitación con insumos obtenidos de los dirigentes comunitarios en temas de emprendimientos y pequeños negocios.
Radiografía socioeconómica
La comunidades Lagartos y Río Polochic, ubicadas en el municipio de Panzós, Alta Verapaz, distantes 290 kilómetros de Ciudad de Guatemala, presentan una situación socioeconómica preocupante.
Según un diagnóstico realizado en el lugar, sus pobladores viven en pobreza y pobreza extrema, en temas de alimentación se encuentra en subsistencia, hay poca producción de alimentos para el consumo local, especialmente de las mujeres y las niñas.
En adición a lo anterior, no existe organización para la producción de alimentos familiares (huertos familiares) ni tampoco se conocen técnicas para el manejo de las siembras o para tener acceso a una mejor alimentación.
Los proyectos productivos que actualmente se están desarrollando especialmente el de la ocra, solo genera contratos individuales, por lo que los ingresos van dirigidos a pocas familias.
El proyecto productivo de arroz, no es rentable debido a la poca producción y la calidad que presenta el mismo; asimismo, la producción de maíz presenta bajos rendimientos (por tipo y condiciones del suelo y las variedades que actualmente utilizan), mientras que la vulnerabilidad del clima es otra de las causas que afectan la producción agrícola. Según el estudio, en época seca los niveles de agua son escasos y en la época de lluvia los niveles de agua son superiores a los necesarios, por lo que en ambos se tienen pérdidas, lo que incrementa los niveles de pobreza.
Por aparte, los ingresos de los comunitarios provienen del pago de jornales que los proyectos productivos les generan.
La población no tiene acceso a fuentes de agua para consumo por lo que su mayor provisión viene de la captación de agua de lluvia rudimentaria, únicamente en invierno. Carecen de centro de salud, tienen poca asistencia técnica para el abordaje de la prevención y saneamiento ambiental; y prácticamente no hay información de identificación de las personas que sufren de desnutrición aguda y crónica.
En el área de educación no se cuenta con establecimiento educativo, aunque si hay cuentan con el apoyo de los servicios de dos maestros que la comunidad les paga.
En servicios básicos, se carece de acceso a electricidad, la comunidad no tiene letrinas, no hay condiciones mínimas para la construcción de viviendas y la distribución de los espacios en los hogares es inadecuada.
Pese a que existe potencial para el desarrollo de proyectos forestales, no se identificaron proyectos productivos de aprovechamiento de los bosques y de los productos no maderables, por lo que se asume que urge asistencia técnica en nuevas tecnologías para el mejoramiento agroforestal y agroindustrial que abras las puertas a nuevos mercados.
Fotos: Cortesía Unidad de Género Mineco.
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